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Todos sentimos esa presión en su día y nos creamos una cuenta de Facebook. Nunca supimos exactamente para qué, pero bueno, no pasaba nada ya que todo el mundo tenía una y no seríamos menos.
EN TEORÍA Facebook es una red social que se usa para:
- compartir con tus amigos cualquier gilipollez que te parezca graciosa (llamar la atención)
- comentar los estados de tus amigos
o gente random que agregas o te agrega aunque no conozcas de nada(demostrando que te importa aunque a lo mejor NO) - poder dar tu opinión en miles de grupos absurdos (
y que normalmente se usan para ligar aunque la gente no lo admita) - dejar tu huella de identidad en la red social (normalmente a base de 8349578573 fotos tuyas y poco más)
- decirle al mundo a base de estados y fotos que eres súper mega feliz o mega desgraciado (hay las dos variantes)
- pasar ratos muertos
informándoteCOTILLEANDO vidas ajenas - BLA, BLA, BLA
y todo ésto, al menos a un servidor NO LE MOLA NADA.
El origen del MAL |
Cada vez que entro en dicha red social me aflora la idea de que hay gente que entra sólo a cotillear mis cosas por puro divertimento, por curiosidad o para ver si las cosas me van bien o mal (y no con buena intención), mirar mis fotos sin razón, etc, etc, etc... No sé si a vosotros os da igual u os molesta, pero para mí es algo que me inquieta realmente.
Y no soy hipócrita, me sumo al club de las personas que hacen ésto y es horrible.
Me considero una buena persona, de esas que las toman por idiotas y tontos y aun así tengo a veces esa curiosidad por la vida ajena. No me parece bien ser parte de algo tan oscuro (porqué lo es en realidad) y la solución más lógica es eliminando mi página de usuario y así dejar todo ésto a un lado.
Cuando estaba decidido a eliminar mi cuenta de Facebook, me he percatado de que allí tengo la página de «fans del blog» y que yo sepa, sin una cuenta personal de la red social te es imposible gestionar una página de este tipo.
Dani 0 - Facebook 1
Con toda la frustración del mundo y no poder eliminar mi cuenta (ya que la necesito para la pobre página del blog), ya he eliminado la posibilidad de compartir o escribir cualquier cosa en mi muro personal, pero esa no es la solución.
No niego que Facebook sea útil (y que probablemente lo sea) pero en mi día a día no sirve absolutamente para nada.
Muchos pensaréis que sí que os es útil porqué podéis hablar con vuestros amigos y comentar sus estados y dar a entender que estáis allí, pero eso lo podéis hacer con una llamada de teléfono o un maldito mensaje de whatsapp. (Que os informo que una llamada es mucho más personal y reconforta bastante más que un mero texto en el chat).
Sea de la manera que sea es casi imposible huir de esta red social, ya sea por presión social, por interés (ya que mi caso es ese con la página del blog), etc...
Sé que hay gente que opina de la misma manera que yo y eso hace que me sienta menos bicho raro, pero es realmente un problema (a mi parecer) el uso excesivo y ABUSIVO de este tipo de redes sociales.
El mundo real está fuera de una pantalla.
Podría seguir hablando y tirando mierda sobre éste tipo de plataformas, pero no tiene ningún sentido decir algo que muchos de los que me leéis pensáis y que probablemente habréis echado en falta mil temas por tocar sobre Facebook. Es así, lo sé, pero no es necesario hablar de ellos, todos sabemos las pegas que tiene y si estamos allí es por nosotros mismos sabiendo que estamos expuestos (por muchos filtros de protección que pongamos), que nuestra privacidad es una ilusión por mucho que ellos digan que es seguro y que nunca sabremos realmente quién puede ver o no nuestras cosas.
Así que a partir de hoy un servidor dejará de colgar artículos ajenos al blog en su muro, dejará de comentar publicaciones y probablemente sólo utilice el chat ya que muchas de las personas que me importan no dejarán de usar la red social para hacerme una triste llamada para saber de mí, eso sí, en mi muro no van a encontrar nada nuevo a partir de hoy.
Exagerado, zumbado, imbécil y lo que muchos quieran llamarme, pero estoy HARTO de Facebook y espero cumplir.
Gracias por leerme.
Dani Escariot.