viernes, 30 de enero de 2015

jueves, 29 de enero de 2015

Ahora pienso en esto:






Dios ha muerto. Dios sigue muerto. Y nosotros lo hemos matado. ¿Cómo podríamos reconfortarnos, los asesinos de todos los asesinos? El más santo y el más poderoso que el mundo ha poseído se ha desangrado bajo nuestros cuchillos: ¿quién limpiará esta sangre de nosotros? ¿Qué agua nos limpiará? ¿Qué rito expiatorio, qué juegos sagrados deberíamos inventar? ¿No es la grandeza de este hecho demasiado grande para nosotros?.



                                                                                                                               Nietzsche


domingo, 25 de enero de 2015

viernes, 23 de enero de 2015

sábado, 17 de enero de 2015

Así me siento hoy

Dice Jodo que mientras "la nube llora, el jardín ríe".


jueves, 27 de noviembre de 2014